El Feng shui en la Protección Civil
Guillermo Robledo
Presidente de la Alianza de Paramédicos y Rescatistas del Estado de GuanajuatoConsultor y Capacitador en Protección Civil
01.02.21 Mx
La superstición es un enemigo natural de la Gestión Integral de Riesgos para la Protección Civil, pues mientras los gestores, consultores, verificadores y académicos hacemos análisis de riesgos en un inmueble, básicamente un centro laboral, para reducir lesiones y enfermedades laborales; eliminar causas potenciales de siniestros antropogénicos, y reducir el impacto de los fenómenos perturbadores naturales; el pensamiento mágico o religioso acusa a entes sobrenaturales tanto de causar los problemas y el resolverlos. Irónicamente la mayoría de actores que participan en la Gestión de Riesgos como el común de la población, son creyentes, es decir, creen en milagros, maldiciones, mandas, oraciones, fantasmas, demonios, dioses, etc. Y sin ánimo de negar esa existencia, pero no los ponen como indicadores en sus bitácoras y evaluaciones, cayendo en franca y absurda contradicción. Para seguir el chiste, creen en el Diablo, pero no tienen el valor de ponerlo como un probable agente causal en su análisis.
La religión y creencias como medios protectores son así mutuamente excluyentes con la Gestión Integral de Riesgos, hasta que se elimine definitivamente el pensamiento mágico, o se agreguen como agentes causales o mecanismos protectores en nuestras normas oficiales.
Tomando el lado amable, aquel en el que coinciden ambos medios, la finalidad de proteger a los individuos, es que es posible rescatar algo positivo de la superstición.
"El feng shui (literalmente, viento y agua) es un antiguo sistema filosófico chino de origen taoísta basado en la ocupación consciente y armónica del espacio, con el fin de lograr de este una influencia positiva sobre las personas que lo ocupan...". Tomado de Wikipedia.
Es frecuente que los supersticiosos y creyentes abusen de certezas encontradas en las religiones, esoterismo o culturas antiguas, para pronunciar una sabiduría inexplicable y que "ellos ya lo sabían desde antes de la Ciencia moderna" 😒 Lo resalto para evitar este cliché posterior a esta publicación. No, no lo sabían, no sabían lo que voy a decir, tenían una idea parecida pero al cabo muy diferente.
Mucha gente occidental sabe directa o indirectamente lo que es el Feng shui, aunque no sea el concepto genuino usado por los militantes y monjes taoístas, y lo relacionamos con el orden y cosas que debe tener una casa para que fluya la buena vibra o energía, que aleje maldiciones y atraiga bendiciones. Y este germen y objetivo es idéntico al usado por la Gestión Integral de Riesgos y el Programa de Autogestión en el Trabajo. Fundamentalmente es realizar las muy conocidas en Seguridad e Higiene como 5 S, las 3 R en suma del análisis de riesgos internos de un inmueble para prevenir lesiones y enfermedades, emergencias y desastres:
1. Eliminar lo que no es útil.
2. Ordenar según su uso y utilidad.
3. Asear metódicamente.
4. Reglamentar y normalizar la zona
5. Seguir una calendario o bitácora anual.
6. Reducir residuos, optimizar los recursos.
7. Reciclar residuos
8. Reutilizar residuos.
Estos conceptos tienen antecedentes complejos en cuanto sí lleva mucho trabajo hacerlos por la constancia o periodicidad y la parte técnica, que no quien sea puede hacerlo. Por poner dos ejemplos, el punto cuatro implica identificar por área de trabajo las situaciones inseguras y actos inseguros, para ello pueden ocuparse verificadores autorizados por el gobierno en medir cantidad de luz, ruido, humedad, temperatura, químicos, extintores, etc. Para hacer lo necesario y suficiente para controlar esos riesgos, que incluyen quizá descripción de procesos, reglas, equipo de protección personal, entre otras cosas. El punto 6 es tarea principalmente de los encargados de calidad y hacer más eficientes los procesos.
Todo esto es un Feng shui sin el lastre supersticioso o mágico, para hacer más eficiente el trabajo, la vida, la salud, la utilidad económica; y la eficiencia parte del concepto de energía y su flujo. Si aplicamos diligentemente las 5 S y 3 R en un Programa de Protección Civil y de Autogestión, el gasto de energía se hace más eficiente en trabajadores que se ausenten menos por enfermedades, lesiones y emergencias. Se hace más eficiente al tener mejores productos o servicios, con mayor calidad y en menor tiempo, incrementando la utilidad y su bonanza.
Para finalizar, el emblema actual de la Protección Civil es de origen religioso, la Estrella de David, y usando la disertación anterior, el Yin Yang la representa mejor, agregando que ese sistema es una homeostasis o alostasis, que busca el equilibrio controlando las energías opuestas, siendo literalmente el Tao, el Camino a seguir: la inercia natural.
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